¿Cuál es la frecuencia ideal para enviar tus campañas de email?

¿Cuántos correos debería enviar a mis clientes para maximizar las ventas sin que se den de baja? O lo que es lo mismo, ¿cuál es la frecuencia ideal?

Esta pregunta se la hacen a diario cientos de profesionales que tienen campañas de email marketing en marcha.

Y seguro que tú también.

Determinar la frecuencia ideal para enviar correos electrónicos es todo un desafío. 

Siento decirte que no hay una solución única para todos los negocios, proyectos o incluso segmento de suscriptores dentro de una misma lista de contactos.

Sí, ya estamos con el famoso “depende” otra vez en escena.

La frecuencia óptima para enviar emails varía según el tipo de comunicaciones que envíes, el sector en el que te encuentres y las preferencias específicas de tu audiencia.

Algunos clientes están encantados de recibir correos diarios, mientras que otros apenas abren tus mensajes. 

Encontrar el equilibrio perfecto es un reto, pero es fundamental para conseguir buenos resultados en tus campañas de email marketing. 

En este artículo te voy a ayudar a encontrar la frecuencia ideal para que maximices tus ventas a través de las campañas de email y minimices la pérdida de suscriptores valiosos.

La importancia de establecer una frecuencia adecuada de envíos

El email marketing tiene el gran potencial de crear vínculos con tus potenciales clientes y fidelizar a los actuales. 

Por eso, es crucial nutrirlos constantemente para fortalecer la relación a largo plazo, lo que a su vez generará lealtad y mayores beneficios con el tiempo.

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Si decides aumentar la frecuencia de tus campañas, corres riesgos.

Si decides dejar de enviar correos con mucha frecuencia, corres riesgos.

Puede parecer que siempre hay riesgos al establecer una frecuencia de envío. 

Lo cierto es que, cuando nos encontramos en los extremos, siempre existen distintos inconvenientes.

Enviar muchos emails puede ser contraproducente. Pero enviar muy pocos también.

Vamos a ver a qué nos enfrentamos en ambos casos.

Enviar correos electrónicos en exceso puede afectar negativamente a tu campaña de marketing

Aquí algunos problemas que puedes encontrar:

• Menor Compromiso. La saturación de la bandeja de entrada puede hacer que tus suscriptores ignoren o borren tus correos sin abrirlos, disminuyendo las tasas de apertura y de clics.

• Aumento de bajas. Los suscriptores pueden sentirse abrumados y optar por darse de baja, reduciendo así el tamaño de tu lista y oportunidades de venta.

• Quejas por spam. Un alto volumen de correos pueden convertirse en más quejas por spam, dañando tu reputación con los Proveedores de Servicios de Internet (ISP) y afectando la entregabilidad.

Enviar muy pocos correos electrónicos puede afectar negativamente a tu campaña de marketing

Ahora nos encontramos en el otro extremo. Y es que enviar correos con poca frecuencia también tiene sus desventajas:

• Oportunidades de venta perdidas. Cada correo electrónico es una oportunidad de venta. Al enviar pocos correos, puedes (es muy probable) que estés dejando de ingresar dinero. Y eso no mola.

• Visibilidad reducida. Si tus correos no aparecen regularmente en la bandeja de entrada, tu marca puede perder visibilidad y relevancia. No estar en el top of mind de tus potenciales clientes, se puede convertir en una gran oportunidad para tus competidores.

• Reputación del remitente en riesgo. La falta de consistencia puede levantar sospechas entre los ISP, afectando negativamente la entregabilidad de tus futuros correos.

• Olvido de los suscriptores. La inactividad puede hacer que tus suscriptores se olviden de ti, disminuyendo el interés y el compromiso con tu marca.

Entonces, si al enviar demasiados emails o prácticamente no enviar corremos riesgos de perder ventas, ¿cómo podemos establecer una frecuencia óptima y encontrar un equilibrio?

Antes de responder esa pregunta, hay que hablar de algunas consideraciones que debes tener en cuenta antes de elegir una frecuencia u otra.

3 factores para establecer la mejor frecuencia de envío en email marketing

Anteriormente te he comentado que no existe una respuesta única. Cada sector, cada negocio, cada campaña y cada persona tiene sus particularidades.

Por eso, es interesante que pienses y analices los siguientes puntos antes de establecer una frecuencia.

Conoce a tu público objetivo

Entender a tu audiencia es crucial. Analiza datos demográficos, comportamientos y preferencias para ajustar la frecuencia de envío a sus expectativas. 

Una buena práctica puede ser realizar encuestas y recopilar feedback para mantener una comunicación que impacte positivamente.

También puedes utilizar el centro de preferencias para que sea el propio suscriptor el que determine la frecuencia que desea.

Analiza tu sector

Investiga las prácticas comunes en tu sector. Observa la frecuencia de envío de tus competidores.

Esto te dará una referencia valiosa para ajustar tu estrategia y asegurarte de que estás cumpliendo con las expectativas del mercado.

Calidad del contenido que envías

Los correos que envíes siempre deben ser relevantes. Si es así, se podría decir que no hay un límite máximo de envíos. 

Para ello es fundamental tener muy bien segmentada tu lista.

Si realmente las comunicaciones son útiles, cuando el suscriptor esté listo para actuar, lo hará. 

Por eso es interesante que ajustes la frecuencia según la temporada y la naturaleza de tus mensajes. 

Las campañas frecuentes pueden ser adecuadas durante lanzamientos o promociones especiales, mientras que el contenido regular y más educativo puede beneficiarse de un enfoque más espaciado. Por ejemplo una frecuencia semanal para este segundo caso es una buena apuesta.

Encuentra un equilibrio entre actualidad, consistencia y esfuerzos de venta.

Como mencionaba más arriba, demasiados correos pueden resultar molestos y llevar a que los suscriptores se den de baja. 

Por eso es interesante realizar pruebas A/B para encontrar la frecuencia óptima y ajustar según el feedback recibido. 

📌 Importante: recuerda que la calidad del contenido siempre debe prevalecer sobre la cantidad.

¿Cómo encontrar la frecuencia ideal?

Vamos a ver un ejercicio que puedes poner en práctica para establecer la frecuencia ideal en tus envíos.

Este experimento consta de 8 pasos.

Paso 1: Define el objetivo y métricas a considerar

Algunos objetivos que puedes plantear son:

• Incrementar la tasa de apertura
• Mejorar la tasa de clics
• Reducir la tasa de baja o desuscripción
• Aumentar las conversiones (ventas, registros, etc.)

Métricas a medir:

• Tasa de apertura
• Tasa de clics
• Tasa de conversión
• Tasa de baja
• Engagement y actividad con el email

Paso 2: Segmenta tu lista de suscriptores

Divide tu lista en varios grupos de tamaño similar. Asegúrate de que cada grupo sea representativo de tu base de datos total para obtener resultados más precisos.

Paso 3: Diseña el experimento

Determina las diferentes frecuencias de envío que deseas probar. 

Por ejemplo:

• Grupo A: un correo por semana
• Grupo B: dos correos por semana
• Grupo C: un correo cada dos semanas

Paso 4: Crea contenido de calidad y relevante

Asegúrate de que el contenido de tus correos electrónicos sea relevante, atractivo y de alta calidad para todos los grupos.

Paso 5: Realiza los envíos

Envía los correos electrónicos a cada grupo según la frecuencia determinada en cada caso.

Mantén la consistencia en el contenido y el formato para cada envío.

Paso 6: Recopila y analiza los datos

Monitorea y registra las métricas definidas anteriormente para cada grupo durante un período de tiempo (por ejemplo, 4-6 meses). 

Asegúrate de tomar nota de cualquier factor externo que pueda influir en los resultados (promociones, eventos, etc.).

Paso 7: Compara los resultados

Analiza las métricas recopiladas para determinar cuál frecuencia de envío resultó en el mejor rendimiento en términos de tus objetivos. 

Puedes usar herramientas de análisis de datos como por ejemplo una hoja de cálculo o plataformas de marketing que ofrezcan análisis integrados, si es tu caso.

Paso 8: Ajusta la estrategia

En base a los resultados obtenidos, es hora de ajustar tu estrategia de envío de emails. 

Puede que descubras que una frecuencia particular maximiza tus métricas clave sin aumentar significativamente la tasa de bajas.

Ejemplo de análisis de resultados

Supongamos que una vez pasados 4 meses de realizar el experimento anterior tienes los siguientes resultados:

Grupo	Apertura	Clics	Conversión	Bajas
Grupo A	25%	5%	2%	1%
Grupo B	20%	4%	1,5%	3%
Grupo C	30%	6%	2,5%	0,5%

En el ejemplo, el Grupo C (frecuencia = un correo cada dos semanas) muestra la mejor tasa de apertura, tasa de clics y tasa de conversión con la menor tasa de baja. 

Esto sugiere que una menor frecuencia de envío es más efectiva para tu audiencia.

No obstante, es un ejemplo inventado. No quiere decir que siempre una frecuencia quincenal sea la mejor opción.

Realiza el experimento con tu audiencia y saca tus propias conclusiones

Este experimento te permitirá determinar la frecuencia de envío ideal basada en datos reales y específicos de tu audiencia. 

Es importante recordar que los resultados pueden variar con el tiempo, por lo que es recomendable realizar estos experimentos periódicamente para adaptarse a los cambios en el comportamiento de los usuarios y las tendencias del mercado.

Conclusiones

Como hemos visto, determinar la frecuencia óptima de los envíos en tu campaña de email marketing es un desafío que requiere un enfoque personalizado. No existe una solución única para todos los negocios, ya que cada sector, audiencia y tipo de comunicación tiene sus propias particularidades.

El equilibrio entre la frecuencia y la relevancia del contenido es fundamental para maximizar las ventas y minimizar la pérdida de suscriptores. 

Recuerda que para encontrar la frecuencia ideal es necesario realizar experimentos controlados, segmentando tu lista de suscriptores y analizando las métricas clave. 

Todo esto te permitirá ajustar la frecuencia de envío según los resultados obtenidos y realizar pruebas periódicas garantizará que tus campañas de email marketing sigan siendo efectivas y alineadas con las necesidades y preferencias de tus suscriptores.