Diseño corporativo: cómo crear una identidad visual adictiva

El diseño corporativo es fundamental a la hora de establecer una identidad fuerte y consistente. Hará que tu empresa destaque y sea reconocida en un mercado específico, construyendo una imagen sólida y diferenciada.

Hoy vamos a cubrir todo lo relacionado con esta área del diseño, explicando qué es, por qué es importante y cómo implementarlo efectivamente.

¿Qué es el diseño corporativo?

El diseño corporativo es la creación y gestión de todos los elementos visuales y gráficos que representan a una empresa de manera coherente y distintiva. Incluye aspectos como el logotipo, los colores, la tipografía, los gráficos y otros elementos que forman parte de la comunicación de marca.

El objetivo detrás de esto es crear una imagen cohesionada a través de todas las acciones que ejecute la empresa, reflejando su personalidad, valores y misión de la empresa, al mismo tiempo que se establece una conexión emocional con su público. Con esto conseguimos una condensación de la empresa a nivel visual que la haga reconocible y diferenciable al resto de competidores.

Componentes clave del diseño corporativo

Como ya hemos comentado, el diseño corporativo atraviesa a la empresa de manera sustancial y abarca varios elementos que deben trabajar en armonía para crear una identidad de marca cohesiva.

Logotipo

Probablemente el elemento más importante dentro del diseño corporativo, ya que es la representación gráfica de la empresa. Lo ideal es que consigas transmitir a través de él la personalidad y características de la empresa, debe ser único, memorable y es fundamental que se adapta bien a diferentes formatos y aplicaciones. Un buen ejemplo sería el icónico “swoosh” de Nike, es simple pero poderoso y se adapta bien a cualquier plataforma.

Aquí te dejo 11 consejos para diseñar un buen logo.

Paleta de Colores

Ya hemos hablado largo y tendido de la importancia del color dentro del sistema de una marca y su capacidad para evocar emociones y establecer asociaciones psicológicas.

Es importante hacer una buena selección de colores, que vayan en consonancia con lo que has querido transmitir con tu logotipo y en los que te puedas apoyar para transmitir el mensaje de la empresa.

Por ejemplo, el rojo y blanco de Coca-Cola evocan sentimientos de energía y positividad. Si piensas en Coca-Cola, piensas en rojo. 

Aquí tienes todos nuestros artículos sobre color:

• Teoría del Color – Parte I – Los significados de los colores
• Teoría del Color – Parte II – Propiedades básicas del color
• Teoría del Color – Parte III – Creando esquemas de color

Tipografía

Otra de las piezas claves para conseguir transmitir tu personalidad y probablemente una de las más olvidadas.

Elegir una buena tipografía es importante para tener una buena coherencia visual, piensa en todos los elementos como piezas de un puzzle que tiene que encajar a la perfección, no puede faltarte ninguna pieza ni puede haber una que sea demasiado diferente al resto o no encaje.

Dependiendo del tipo de letra que elijas podrás transmitir modernidad, fuerza, amabilidad, elegancia, misterio, innovación…

Y por supuesto no nos podemos olvidar de una de las cosas más importantes: ante todo debe de tener buena legalidad.

Si quieres saber más del tema, te dejo nuestro artículo sobre tipografías aquí.

Imaginería

Este elemento es el conjunto de imágenes que representan a la empresa, como fotografías y gráficos. Es fundamental que sean seleccionados con cuidado para reflejar el mensaje de la organización. Por ejemplo deberás definir si usar ilustraciones, infografías, gráficos, qué estilo de fotos, entre otros aspectos. 

Por ejemplo, Apple presenta sus productos en escenarios minimalistas y elegantes, reforzando su identidad de marca como innovadora y sofisticada.

Estilo Visual

Esta parte hace especial hincapié en cómo se aplican los elementos visuales del diseño gráfico, asegurando un uso consistente de las formas, líneas y estilos características de la marca.

Si estos elementos son usados de manera adecuada contribuiremos a la coherencia visual y a la identificación instantánea de la marca.

Papel corporativo

Las empresas más tradicionales necesitan tener una buena papelería corporativa. Aquí entrarían elementos como papel para cartas de diferentes tamaños, sobres de diferentes tamaños, tarjetas de visita, facturas, presupuestos, libretas, papel de oficina… básicamente cualquier documentación o entregable digital o físico que se hace para consumo interno de la empresa o para otras personas o empresas. 

Sitio web

Este entorno digital probablemente vaya a ser el sitio donde más información sobre tu empresa haya (visión, misión, valores, historia, equipo…). Es fundamental que todo lo que cuentes sobre tu empresa se vea reflejado en la estética de la web también, que haya una consonancia y coherencia entre lo que tus clientes leen y lo que ven. No descuides tampoco la experiencia del usuario al usar tu web, sobre todo si hay procesos de compra involucrados, ya que, si tu página no es intuitiva, fácil y agradable de usar, perderás ventas.

Redes sociales

Tus perfiles de redes sociales como Facebook, Twitter, Instagram o cualquier otra, son otro escaparate más que debes usar para atraer clientes, así que deben de funcionar como una extensión más de tu identidad. Además, en estas plataformas se usan diferentes medios: textos, imágenes, vídeos…, por lo que en estos entornos debes hacer un uso consciente de las imágenes y el tono de voz, y asegurarte de que se alinean con la marca todo lo posible. 

Packaging o embalaje de producto

Un buen diseño en el packaging de tu producto puede marcar la diferencia entre conseguir o no una venta. Debe ser llamativo y original, para diferenciarse del resto, sin perder de vista la funcionalidad del producto, pero ante todo debe integrar a la perfección la esencia de la marca e implementar todos los elementos que la definan a nivel visual.

¿Por qué es importante el diseño corporativo?

Ayuda a la diferenciación en el mercado

Esta identidad visual corporativa distintiva de la que estamos hablando es la que va a permitir que tu empresa se diferencie del resto, cuanto más consiga desmarcarse del resto de la competencia mejor, ya que será más memorable. Esto es importante, ya que, aunque el consumidor hace muchas de sus decisiones basadas en la lógica y lo que considera que es la mejor opción, otra muchas simplemente se guían por la estética y lo que les trasmite la marca.

Consistencia en la comunicación

Como todos los materiales de la marca siguen una misma pauta, desde la página web hasta el papel de la impresora, hacemos que la experiencia con la empresa sea uniforme, fluida y reconocible sea cual sea el contacto que tengan con ella.

Contribuye con la experiencia de usuario

La experiencia de usuario, aunque normalmente ligada a entornos digitales, es un aspecto que se da cada vez que cualquier persona interactúa con un producto o servicio. Cualquier acción generará una experiencia de usuario, y cuanto mejor sea dicha interacción una mayor retención y satisfacción conseguiremos.

Logra una identidad visual

La identidad visual corporativa permite tener una imagen distintiva, clara y reconocible para la empresa. Todos los elementos ya mencionados, forman juntos una representación visual única que facilitará el ser recordada e identificada por lo clientes, estableciendo conexiones emocionales con ellos.

Comunica los valores y personalidad de marca

Tener un buen diseño corporativo va a facilitar mucho la comunicación de los mensajes de la empresa. Elegir los elementos visuales correctos con la estética adecuada, va a “lubricar” la comunicación que hagas, ya que comunicarán mensajes subyacentes sobre la cultura y los principios fundamentales de la organización. El mensaje será mucho más potente y cohesivo y tendrá un mayor impacto en el consumidor.

Por ejemplo, una persona que tiene un estilo de vida muy concreto, como podría ser el veganismo, va a comprar marcas que se alineen más con ese tipo de pensamiento.

Fomenta la lealtad del cliente

Si tenemos una marca fuerte, consistente y reconocible vamos a fomentar la lealtad de los clientes, ya que los consumidores van a confiar más en marcas que tienen estas características, ya que cada experiencia de compra es positiva.

Influye en las decisiones de compra

Como ya hemos dicho, el consumidor, a la hora de comprar, intentará siempre hacer la mejor elección en cuanto sus necesidades, de una manera informada y objetiva. Pero cuando esté indeciso entre dos o más opciones, la parte estética y el diseño del producto va a tener una función fundamental, ya que se guiará por percepciones subjetivas.

Facilita el recuerdo de marca

Todo esto va a ayudar que el recuerdo de nuestra marca en la mente del consumidor sea mucho más duradero e impactante. Es importante tener un buen posicionamiento de imagen de marca en el consumidor, así conseguiremos que nuestro cliente piense en nuestra empresa cada vez que necesite la categoría de producto o servicio que ofrecemos.

Genera confianza y credibilidad

Un diseño inconsistente puede dar la impresión de desorganización y falta de profesionalidad, por lo que mantener la cohesión y cuidar la calidad de nuestra imagen va a ser un punto crucial para construir esta relación de confianza y credibilidad entre el consumidor y la empresa o producto.

Pasos para un buen diseño corporativo

1. Investigación y análisis

Primero debemos empezar por hacer una investigación a fondo para entender bien nuestra empresa, su mercado, su audiencia y por supuesto la competencia. También será útil analizar si nuestro sector sigue alguna tendencia de diseño concreta, y evaluar si merece la pena seguir esa estrategia establecida o estudiar otros enfoques que puedan diferenciarnos. Esta probablemente sea la parte más importante del proceso, ya que la información recabada en este momento será la que determine muchas de las decisiones que se tomaran en el proceso.

2. Definición de objetivos

Partiendo de los resultados de tu investigación, define la identidad de la marca, es decir, la misión, visión, valores, personalidad… de la empresa. Estos elementos es importante tenerlos claros y siempre presentes, ya que es fundamental que sean transmitidos a través de la imagen de la empresa. Si lo que dices que eres no coincide con lo que haces, entonces tenemos un problema.

También puede ser útil que intentes resumir en unas pocas palabras o una frase el mensaje principal que deseas transmitir a través de la imagen de tu empresa, y asegúrate de que estas palabras están presentes durante todo el proceso, para no perder el foco.

3. Desarrollo y creación

Y es ahora cuando recién nos podemos poner a trabajar en los componentes de nuestro diseño corporativo, como el logotipo, colores corporativos y tipografía.

Lo ideal es que pongas a disposición de los diseñadores encargados del proyecto toda la información de los pasos anteriores. Cuanto más clara tengan tu visión mejor podrán llevarla a cabo, debes de dar instrucciones concisas y explicar detenidamente lo que quieres y no, no vale con un “quiero un logo, vendo zapatos”. Si el diseñador tiene una visión holística del proyecto podrá hacer que todos los materiales que cree estén alineados con la realidad de la empresa.

Lo normal es que se exploren diferentes conceptos y se vayan refinando hasta que se llegue a un resultado que cumpla con los objetivos que nos habíamos planteado. Y aunque en este apartado la estética a lo que más atención se presta no olvidemos que los diseños deben de ser versátiles y funcionales.

4. Pruebas, retroalimentación e iteraciones

Es recomendable hacer pruebas y recopilar retroalimentación antes de implementar totalmente el diseño, quizás puedan hacerse un par de iteraciones más que acaben de mejorar el producto final. Para ello puedes incluir opiniones de stakeholders, focus groups o pruebas de usabilidad.

5. Creación de guías

Una vez que tengamos el diseño final, debemos establecer unas pautas claras sobre cómo usar todos estos elementos. Este documento es conocido como Manual de marca o Manual de identidad visual corporativa, y es muy recomendable contar con uno. El manual hará posible que cualquier persona ajena a la entidad que tenga que usar cualquier elemento de la marca sepa cómo hacerlo correctamente sin repercutir negativamente en la imagen que tan duramente has trabajado para conseguir.

Si quieres saber más sobre este tema te dejo nuestro artículo Manual de identidad visual o marca: ¿necesitas uno? para que le eches un ojo.

6. Puesta en marcha

Ahora toca implementar los elementos en todos los puntos de contacto con el cliente, ya sean online u offline.

Pero no te confundas, esto no significa que una vez implementado te puedas relajar y olvidar de este tema, es importante monitorear y actualizar el diseño según sea necesario a lo largo del tiempo para mantener la relevancia y coherencia.

7. Comunicación

Es importante que todos los miembros que formen parte de la empresa entiendan y adopten la identidad. Esto va a ayudar a que la implementación sea homogénea, coherente y que todos los involucrados estén alineados con los valores y el mensaje de la marca.

Como ves, el diseño corporativo es mucho más que “cosas bonitas”, es una herramienta poderosa que puede influir significativamente en el éxito de una empresa. Aunque puede significar un reto y requerir una inversión considerable, los beneficios a largo plazo son notorios.