Verdades sobre tus suscriptores inactivos que debes conocer
Yacarlí Carreño · 29 May, 2023 · Email marketing avanzado · 6 min
¿Estás obteniendo malos resultados con tus campañas de email marketing? Hoy te contamos algunas verdades sobre tus suscriptores inactivos que debes conocer.
En las campañas de email marketing –como en la vida– hay una premisa clara: Calidad es mejor que cantidad. De nada vale tener una enorme lista de suscriptores que están cansados, no quieren saber de tu marca o simplemente han perdido el interés.
Como en toda relación, esto puede pasar y está bien… y no pasa nada. Es mejor cortar a tiempo por el bien de ambas partes. Pues, en el mundo del emailing es igual: mientras antes dejes ir a esos suscriptores que no ven tus emails, más energía podrás invertir en captar nuevos que sí quieran saber de ti.
Mantener receptores dormidos / inactivos solo va a conducirte a obtener malos resultados y diluir tus números. Hay que apostar siempre por suscriptores de calidad y que sigan activos en la relación.
Ahora bien, ¿hay alguna forma de reconquistar / reactivar a estos suscriptores? ¿Qué se puede hacer? En este artículo comentaremos algunas verdades sobre tus suscriptores inactivos que seguro te darán muchas luces al respecto.
Algunas verdades sobre tus suscriptores inactivos:
1. Lo intentamos definir, pero no es tan fácil
No hay una definición estándar para considerar que un suscriptor es inactivo. Cada marca tiene su propia definición única de lo que es un suscriptor inactivo y cada una conoce su ritmo. Las marcas guían esa definición en gran medida por el efecto negativo que tiene el envío de correos electrónicos a estos suscriptores en su capacidad de entrega.
Sin embargo, muchas marcas utilizan una serie de términos para describir diversos grados de inactividad, casi siempre con el fin de tratar de manera diferente a cada uno de estos grupos. Por lo general, “inactivo” es un punto en algún lugar en el medio del espectro de inactividad. Cuando una marca identifica un suscriptor inactivo, a menudo lo que hace es bajar la frecuencia de envío de correos electrónicos a esa personas. Por ejemplo, las marcas intentar enviar solo las campañas claves, más importantes; o, también, suelen intentar enviar una serie de emails de reenganche para conocer las razones de la inactividad o llamar la atención.
Antes de que un suscriptor se vuelva inactivo, muchas marcas definen un período en el que se desconectan o caducan. A menudo, estos suscriptores no reciben correos con menos frecuencia, pero estos correos electrónicos pueden incluir líneas de asunto específicas o textos diseñados para estimular la participación. A veces, estos suscriptores en realidad reciben más mensajes, incluidas campañas de reactivación, en un intento de generar participación antes de que el problema empeore.
Después de que un suscriptor está inactivo por un tiempo y los esfuerzos de volver a comprometerse no han tenido éxito, estos suscriptores se vuelven inactivos a largo plazo o crónicamente. Las marcas generalmente envían a estos suscriptores una campaña de reautorización para tratar de que reafirmen explícitamente su interés en recibir sus correos electrónicos. Si no vuelven a confirmar su permiso, se eliminan de todos los correos futuros. Esto es así y, como hemos dicho antes, aunque duela, es lo mejor para las dos partes.
2. Muchas marcas hacen excepciones en torno a los suscriptores inactivos
Las empresas están constantemente bajo presión para aumentar el alcance de sus mensajes ampliando su audiencia. En algún punto, eso a menudo significa cambiar temporalmente sus reglas en torno a los inactivos.
Por ejemplo, durante el corazón de la temporada navideña, alrededor del Black Friday y el Cyber Monday, los minoristas corren el riesgo de experimentar problemas de entrega. ¿Por qué? Porque a cambio de impulsar las ventas a corto plazo, envían más campañas por correo electrónico a más inactivos. A veces esa apuesta merece la pena, pero no siempre. Es alto el riesgo de atosigar o asfixiar a los suscriptores y lograr el efecto contrario ⚠️
Más allá de estos momentos clave, estacionales, algunas marcas también hacen excepciones para suscriptores individuales. Es decir, se resisten a suprimir a los crónicamente inactivos que también son clientes activos de alto valor. Estas marcas toman ese riesgo debido a nuestra próxima verdad ⬇️
3. Las aperturas no lo son todo
Medir si nuestros suscriptores están activos observando si abren o no los emails es importante, es un criterio, pero no lo es todo. Un dato por sí mismo no tiene valor si no es en relación / comparación con otros. Hay que intentar tener en cuenta también las interacciones conseguidas con las campañas.
Esa brecha en el seguimiento de la interacción por correo electrónico se ha convertido en un abismo gracias a Mail Privacy Protection (MPP) de Apple. El impacto es tan alto que la mayoría de las grandes marcas B2C tendrán que cambiar fundamentalmente la forma en que definen las audiencias activas de email marketing. Pero, incluso con esas dificultades, no hay escapatoria a la siguiente verdad.
4. Eventualmente, todas las marcas dejan de enviar correos electrónicos a sus suscriptores inactivos
Aparte de las excepciones y bajas individuales, si envías correos electrónicos sin cesar a los suscriptores que no están activos / interesados, eventualmente sufrirás niveles crecientes de bloqueo y serás marcado como spam por parte de los proveedores de correo electrónico. En ese momento, comprometes tu capacidad para llegar a los suscriptores activos que generan la gran mayoría de tu interacción e ingresos de marketing por correo electrónico. Nadie quiere hacer eso ni llegar ahí.
Ahora, la cantidad exacta de inactividad que tolera una marca antes de que tenga que comenzar a suprimir a sus suscriptores crónicamente inactivos varía mucho y depende de muchos factores. Esto incluye su tasa de participación general, la frecuencia de los correos electrónicos y el tamaño de la lista. Pero, en general, es alrededor de los seis meses para los remitentes de alta frecuencia y alrededor de los 18 meses para los remitentes de baja frecuencia.
Incluso, si es posible estirar con seguridad más allá de los 18 meses, es aconsejable tratar los 24 meses como un límite estricto. Una de las razones es que algunos proveedores de buzones declaran cuentas de correo electrónico abandonadas después de dos años sin iniciar sesión. Convierten algunas de esas cuentas en trampas de spam recicladas. Entonces, los peligros de la capacidad de entrega aumentan significativamente después de ese punto. Pero, hay otra razón para respetar el límite de dos años que está relacionada con la verdad final.
5. Respetar la inactividad también se trata de respetar el permiso
Corresponde a las marcas reconocer que si un suscriptor deja de interactuar con sus correos electrónicos, en cierto punto significa que ha retirado el permiso a recibir comunicaciones. Es por eso que los proveedores de buzones han hecho que el compromiso sea tan fundamental para sus algoritmos de filtrado de correo no deseado.
Las leyes antispam también han validado esa línea de razonamiento. Por ejemplo, la GDPR estipula que las marcas deben dejar de enviar correos electrónicos a suscriptores y clientes después de 24 meses de inactividad.
En conclusión:
Esperamos que con estos criterios puedes sentar las bases de una posible estrategia de email marketing para:
- Observar tus resultados, métricas.
- Clasificar tu base de datos en sus suscriptores activos, inactivos; o con diferentes niveles de actividad.
- Sentar las bases de una estrategia específica para cada uno de esos casos. ¿Quieres que desarrollemos nuevos artículos para esos diferentes niveles de actividad? Déjanos un comentario y lo tendremos en cuenta para nuevas propuestas ⬇️
– Crear alguna campaña de escucha:
Creemos en el email marketing como herramienta de escucha social y de interacción entre las personas y las marcas. Úsalo. Sin miedo. Envía un email a tu audiencia inactiva para preguntarles: si siguen ahí, si están interesados, si quieren seguir. Conocer las razones de la apatía o el descontento también te ayudará a tomar decisiones claves para el futuro.
- Hazlo bonito, chulo y atractivo.
- Ofréceles algún incentivo si es necesario. Siempre funciona para conseguir más respuestas. Es otra verdad… ¡y lo sabes!
– Envía una campaña de recuperación / reactivación
Inténtalo. Todo se puede solucionar. Piensa en qué les puedes ofrecer para traerlos de vuelta y volver a encender la llama de la relación.
Pregúntate: ¿Con qué crees que podrías llamar su atención, sorprenderlos?
Usa estos consejos para diseñar una estrategia y administrar y desbloquear todos los matices de la inactividad. De esta manera, tu marca podrá maximizar sus oportunidades en el marketing por correo electrónico mientras minimiza su capacidad de entrega y los riesgos legales.
¿Qué alternativas hay para intentar activar a tus suscriptores inactivos?
A modo de recap: Las principales opciones en este punto son:
- Enviar un último email despertador a los suscriptores inactivos que no han abierto o hecho clic en ninguno de tus correos electrónicos promocionales en mucho tiempo.
¿Cuánto es mucho tiempo? Además de la referencia que hemos puesto arriba, si nos basamos en nuestra experiencia como plataforma de email marketing, consideramos que, depende de la frecuencia con la que envíes comunicaciones. Es verdad, seis meses podrían ser más que suficientes para hacer este análisis y clasificación. Pero, si tu frecuencia de envío es muy baja (un correo al mes o menos), quizás sea mejor medirlo en correos sin abrir más que en tiempo.
Por ejemplo: podríamos considerar que una persona está inactiva después de tres o cuatro emails sin abrir. En esos casos quizás mejor hacer algún envío a tiempo que sirva a modo preventivo para cuidar la relación. Anticipate en la medida de lo posible preguntando a estas personas de la forma más genuina y auténtica por qué han perdido el interés y qué puedes hacer por ellas.
Recuerda: