18 mitos del email marketing: ¿verdaderos o falsos?
Pablo Díaz · 19 Jun, 2019 · Email marketing avanzado · 9 min
Existen muchos mitos acerca del email marketing, pero muchos de ellos son inexactos, cuando no directamente falsos.
Creerse estas afirmaciones pueden llevar a descartar el email como canal de marketing para los negocios, o no obtener unos resultados tan óptimos como se podrían conseguir.
En este post analizaremos algunos de estos mitos más populares y explicaremos qué hay de verdad en ellos (si es que lo hay).
18 mitos del Email Marketing
1. El email marketing está obsoleto
El hecho de que el email sea una tecnología muy veterana, y que en las últimas décadas hayan surgido diversos canales a través de los cuales los usuarios pueden acceder a contenidos (especialmente las redes sociales), ha hecho creer a mucha gente que el email prácticamente ha pasado a mejor vida.
En Acumbamail: Mailchimp
Este es uno de los mitos relacionados con el mailing más extendidos. Si te digo que es falso, no tendrías por qué creértelo. Por eso, aquí van algunas estadísticas que lo demuestran:
- Hay unos 3700 millones de usuarios de email en la actualidad y se estima que para 2022 este número habrá aumentado hasta unos 4.000 millones (Statista)
- El 90% de los consumidores utilizan el email al menos una vez al día (SalesForce)
- El 80% de los retailers señalan el email como el mejor método de retención de clientes (RobbenMedia)
- El 73% de los millenials prefieren recibir las comunicaciones comerciales por email antes que por otros medios (Litmus)
- Más del 70% de los profesionales del marketing b2b consideran el email un canal esencial para el crecimiento de su negocio (SalesForce)
A la vista de estos números, queda bastante claro que el email aún tiene mucho que decir, especialmente como canal de marketing y comunicación de contenidos.
2. El email marketing es ineficaz
Lo cierto es que el email es uno de los canales de marketing directo más eficaces que se puede utilizar, no sólo en términos de retorno de la inversión que también, pues puede llegar a alcanzar los 42 dólares por cada dólar invertido.
Es también un canal que ha demostrado su eficacia apoyando la conversión mediante la calificación y nutrición de leads, aumentando el life time value de los clientes o para aumentar el pedido medio a través del cross-selling o el up-selling.
Así mismo, puede utilizarse para aumentar la relación y confianza con el cliente mediante email transaccionales o haciendo llegar contenido que genere valor añadido, favoreciendo la relación más estrecha entre el usuario y la marca.
Además, frente a otros canales como las redes sociales o publicitarias, cuenta con las ventajas de que el alcance no dependa de cambios de algoritmos y su precio no sea volátil y sensible a estacionalidad o entrada de nuevos players en el mercado.
3. Desde la entrada en vigor del GDPR, no se pueden enviar campañas de mailing
El 25 de mayo de 2018 el nuevo Reglamento General de Protección de Datos, más conocido como GDPR, entró en vigor generando un gran terremoto en el terreno del email.
Hubo mucha desinformación, cundió el pánico y algunas empresas enviaron campañas de renovación del consentimiento cuando no tenían por qué.
Más de un año después, todo está mucho más calmado. Aun así, hay quien piensa que el GDPR prohibe o limita el envío de campañas de mailing masivo.
Lo cierto es que esta nueva legislación unifica el criterio entre países de la unión europea en materia de protección de datos, y endureció algunos supuestos como el de recoger el consentimiento explícito inequívoco de los usuarios para incluirlos en una base de datos.
Sin embargo, no hubo ningún cambio radical y las malas prácticas o directamente ilegales, lo eran antes de esta ley y lo siguen siendo después.
Si tu base de datos está recogida con criterios adecuados y de acuerdo a la legislación, ni antes ni ahora debes tener problema en enviar comunicaciones por email.
Si en algún momento has llevado a cabo malas prácticas en este sentido, tampoco estabas haciendo lo correcto en los años previos a esta ley.
4. El mailing masivo es spam
El hecho de enviar un mismo email a una serie de suscriptores recogidos en una base de datos, incluso si este tiene fines comerciales, no es sinónimo de spam necesariamente, aunque mucha gente piense que así es.
El SPAM o correo no deseado es, literalmente, el correo comercial que llega a la dirección de un usuario sin que este haya otorgado su consentimiento para recibirlo.
Si tus suscriptores han mostrado interés en recibir tus comunicaciones, tus envíos serán perfectamente legítimos.
Seguir las buenas prácticas de las campañas de mailing te evitarán caer por error en los filtros de spam.
El extendido mito que equipara email marketing con spam es, por lo tanto, totalmente falso.
5. Lo más importante de la campaña es el asunto
Es cierto que el asunto es lo único que la mayoría (normalmente) de tus suscriptores verá del email y será lo que le convenza de abrirlo o no.
No vamos a negar aquí la importancia de un buen asunto para tus campañas, pero el éxito del email marketing es más bien una combinación de hacer bien las cosas en diversos campos y no recae de manera abrumadora en uno solo: ni siquiera en el asunto.
Por eso, está bien conocer las buenas prácticas para escribir el asunto del email, pero no por ello descuides el resto de elementos de tu campaña.
6. Cuantos más suscriptores, mejor
Conseguir nuevos suscriptores es positivo, sin embargo, a la hora de crear la lista debe primar la calidad sobre la cantidad. De nada sirve tener un gran número de suscriptores si estos no están interesados en tus envíos, pues tus campañas sólo generarán desinterés.
Sin embargo, si consigues que tu lista crezca de manera sostenida pero mediante suscriptores realmente interesados en tus envíos, todas las métricas importantes (aperturas, CTR, conversiones, ROI), mejorarán exponencialmente.
Uno de los ejemplos más claros para desmontar este mito es el doble opt-in: el hecho de enviar un correo de confirmación hace que la lista crezca más lentamente (debido a que un porcentaje de usuarios nunca confirman el alta), pero provoca a la vez que se trate de un público con un engagement mucho mayor con tus envíos, pues han demostrado un gran interés al tomarse la molestia de abrir y hacer click en el correo de confirmación.
Por lo tanto: ¿listas enormes? Estupendo, siempre que sean de suscriptores realmente interesados. ¿Listas pequeñas? No tienen nada de malo, y quizá les saques más partido que a una grande.
7. Cuantos más suscriptores reciban la campaña, mejor
Ya que tienes tu lista de suscriptores, ¿por qué no enviarle tu campaña a todos ellos? Cuanto más envíes, más posibilidades de que abran e interactúen con tu email, ¿no? Error. Una de las claves del éxito de las campañas de email es la segmentación de la lista para realizar envíos lo más certeros posible.
De nuevo, en este sentido, ten en cuenta que menos es más. No tienes que enviar todos tus correos a toda tu base de datos, tienes que enviar sólo contenido relevante a cada segmento.
8. Es malo que la gente se de de baja de tus listas
Con lo que cuesta conseguir suscriptores, no es muy agradable que se den de baja. Sin embargo, tienes que pensar que la alternativa es peor.
Un suscriptor que haya perdido el interés en tus envíos dejará de abrir tus correos, afectando a tu tasa de apertura o (y esto hay que evitarlo a toda costa), marcará tus envíos como spam.
Por lo tanto, lo mejor es que facilites un proceso de baja sencillo para todos aquellos que quieran dejar de recibir tus correos y evitar males mayores que afecten a tus campañas.
Para que se queden contigo, ofréceles contenido de su interés, pero no les dificultes el proceso de baja.
9. Hay que borrar a los usuarios inactivos
Es verdad que de nada te sirve mantener en la base de datos a usuarios que no interactúan con tus campañas ya que sólo disminuirán tus ratios de apertura.
Sin embargo, antes de hacerlo directamente, merece la pena establecer una estrategia de campañas de reactivación, para intentar “devolverlos a la vida” antes de eliminarlos definitivamente de tu base de datos.
10. El mejor día para enviar es el martes
Esta es una de esas generalizaciones que quedan muy bien cómo relleno en post del tipo “X consejos para mejorar tus campañas de email”, pero lo cierto es que es una afirmación con poco sustento.
El día (y la hora) más beneficioso para enviar depende mucho del sector y del tipo de suscriptor que tengas. Hay contenido más susceptible de abrirse a diario y en horario de oficina, pero otro tipo de email probablemente alcance más éxito los fines de semana.
Lo mejor que puedes hacer ante estas afirmaciones tan vagas es estudiar tu sector y a tus suscriptores y llegar tu mismo a la conclusión de cual es el mejor momento para enviar tus campañas.
11. No se puede enviar el mismo correo más de una vez
El hecho de que un suscriptor no haya abierto tu correo puede indicar dos situaciones: lo ha visto y no le ha interesado, o le ha pasado desapercibido por diversos motivos.
Por si es el segundo caso, no está de más realizar un segundo intento que puede generarte algunas aperturas más de las iniciales. En Acumbamail disponemos de una herramienta de reenvío cambiando el asunto a aquellos suscriptores que no abrieron la primera vez.
12. Es mejor usar plantillas HTML / Es mejor utilizar texto plano
Estas dos afirmaciones forman un “mito contradictorio”, pues puedes encontrar defensores de ambas posturas fácilmente.
La respuesta por la que nos inclinamos nosotros es: “depende”.
¿De qué? Del tipo de email, del suscriptor, de la temática, etc.
Lo único que podemos asegurar es que si usas una plantilla HTML esta debe ser responsive con un código adecuado y una proporción adecuada entre imágenes y texto.
13. Los correos cortos son más efectivos
El hecho de que la información cada vez es más breve y veloz en general, ha hecho creer que ya nadie es capaz de leer un texto de cierta longitud aunque esté interesado en el tema.
Esto no es verdad, y, de nuevo, dependiendo de la temática y el tipo de envío, un texto largo puede ser perfectamente válido para generar el interés y la interacción de tus suscriptores. Si no nos crees, podemos darte algunos ejemplos de newsletter longevas y exitosas que no se caracterizan por ser excesivamente breves, como la Bonilista, o Nexdraft.
14. La tasa de apertura es la métrica más importante
Es cierto que la tasa de apertura es uno de los indicadores más importantes a la hora de medir el rendimiento de tus campañas, y todo el tiempo y esfuerzo que inviertas en mejorarla, merecerá la pena.
Ahora bien, en el email marketing existen otras métricas a las que conviene prestar atención. Se trata de indicadores como el CTR, la tasa de conversión o el churn rate entre muchas otras que puedes conocer en detalle en este artículo.
15. Los emails automáticos son impersonales
La automatización es una tendencia en el marketing online, y el canal de correo electrónico no es una excepción. Cada vez más herramientas ofrecen la posibilidad de programar envíos para que se realicen no a una hora concreta y a diversos suscriptores, si no en el momento en que uno de ellos tenga un comportamiento determinado.
Esta tecnología permite llevar a cabo envíos mucho más certeros que aumentan la tasa de apertura y la interacción.
Pero el hecho de que puedas configurar estos eventos y que el flujo de envíos vaya haciéndose de manera automática, no quiere decir que sean correos fríos e impersonales. Al revés, el hecho de derivar a los suscriptores según cómo se comporten con tus campañas previas y tu sitio web te permitirá conocerlo mejor y afinar mucho más el contenido que le estás enviando.
16. Comprar bases de datos es una buena idea
Aunque parezca mentira, aún hay gente que piensa que comprar bases de datos para hacer envíos masivos de email es una buena idea.
Lo cierto es que es una forma muy rápida de tirar el dinero, pues estarás enviando mensajes a unos usuarios que nunca te dieron permiso, ni mostraron ningún interés previamente en tus comunicaciones. El mejor escenario es que te ignoren, pero lo normal es que caigas en los filtros de spam con relativa velocidad.
Lo único cierto es que lo más rentable es construir una base de datos de manera ética y legal, aunque sea un camino más largo es, sin duda, también uno más beneficioso a largo plazo.
17. El público joven no lee los emails
Una de las principales preocupaciones de las empresas y profesionales del marketing es: ¿cómo conecto con los jóvenes sin parecer el Sr. Burns con la camiseta y el gorro de Jimbo? Durante unos años, la piedra filosofal para solucionar este problema han parecido ser las redes sociales pero, ¿es cierto que las generaciones jóvenes ya no utilizan el email? Los siguientes datos dicen lo contrario:
- El 73% de los millenial prefieren el email para recibir comunicaciones comerciales de las empresas frente a otros canales
- 72% de la población entre 18 y 24 años prefiere consultar el email en su smartphone
- De hecho, de acuerdo con un estudio de la CNBC son la generación que más tiempo pasa en la bandeja de entrada de toda la historia
Como ves, el email es un canal que sigue siendo apropiado para comunicar con la gente joven.
18. Es una tecnología que no evoluciona
Si bien es cierto que, como hemos mencionado, el email es uno de los canales veteranos de internet, esto no significa que esté estancado ni que las estrategias sean las mismas.
Al igual que la web, el email tuvo que adaptarse al paso de desktop a mobile mediante el diseño responsive y los grandes clientes de correo no paran de anunciar novedades para aumentar el contenido dinámico dentro de los correos, como por ejemplo el anuncio de Gmail de implementar la tecnología AMP.
Se trata, por tanto, de un canal en continua evolución e innovación en el que hay que estar al día para seguir teniendo resultados positivos.
Conclusión
Como has podido leer, hay muchas creencias erróneas resumidas en estos mitos del email marketing, y esperamos que este post te haya ayudado a aclarar tus posibles dudas.
Visita nuestra Guía de email marketing paso a paso para conocer todos los detalles de cómo crear y enviar una campaña desde cero con las máximas garantías de éxito.
Si eres cliente de Acumbamail y tienes alguna duda al respecto, llámanos al teléfono 911 988 405 o escríbenos a soporte@acumbamail.com y estaremos encantados de ayudarte.